viernes, 3 de agosto de 2018

Reseña: "Waylander. Ciclo de Drenai 1" de David Gemmell



Waylander. Ciclo Drenai 1




Título:
Waylander (Ciclo Drenai 1)
Autor:
David Gemmell
Editorial:
Gigamesh
Edición:
Rústica con solapas
Páginas:
304
Precio:
--
ISBN:
9788493225056








Sinopsis: La forja de un héroe legendario.

Primera entrega de la serie de fantasía heroica más popular del momento.

Tras el asesinato del rey, Drenai es devastada por el implacable Imperio Vagriano y los últimos reductos de su ejército resisten al borde de la aniquilación. Sólo si se encontrara la mítica Armadura de Bronce existiría alguna esperanza de victoria, pero la búsqueda es encomendada al hombre que acabó con la vida del rey y que propició el inicio de la guerra: Waylander el Destructor.

Waylander es la primera novela del ciclo de Drenai, con el que el británico David Gemmell se ha consagrado como el más destacado sucesor de la tradición encarnada por Robert. E. Howard, Fritz Leiber y Michael Moorcock. Con un estilo sobrio y elegante, Gemmell recrea un personaje despiadado, amoral y tan complejo como seductor, y lleva a la fantasía heroica a unas cotas de dramatismo y madurez desconocidas hasta el momento.



Waylander de David Gemmell


La nueva reseña de este Blog se trata de una novela de fantasía épica escrita hace tiempo, Waylander del fallecido David Gemmell, la primera novela en la cronología del Ciclo Drenai de este autor británico, uno de los más reconocidos en el mundo anglosajón. No es casualidad que un prestigioso premio de literatura fantástica lleva su nombre.

Esta novela tiene ya algunos años, su publicación en Reino Unido fue en 1986, aunque no llegaría a España hasta el 2003 de la mano de Gigamesh.

Waylander nos lleva al mundo fantástico de Drenai, un lugar oscuro y cruento donde se muestran todas las miserias de la guerra: saqueos, muertes, violaciones... En este escenario es donde nos encontramos a Dakeyras, alias Waylander “el destructor”, un asesino despiadado sin escrúpulos, hombre de pocas palabras, mirada adusta y un terrible pasado, que con su ballesta doble vende sus servicios al mejor postor. De forma accidental, tras asesinar a unos mercenarios que le habían robado el caballo, salva a Dardalion un joven sacerdote pacifista. Este encuentro marcará el destino de ambos, iniciando Waylander un camino de redención y por el contrario el sacerdote empezará a acercarse a la oscuridad. Este tema, la redención hacia la dirección adecuada, es una constante del libro.

En un inicio igual parece que Waylander resulta excesivamente tópico, dando la sensación de que los sucesos pasaban porque sí, pero eso no es del todo cierto. A diferencia de la actual fantasía, como Martin o Sapkowski, que suelen ahondar en los pensamientos de los personajes, aclarando cada acción; David Gemmell da las explicaciones justas y cuando, como narrador, le es necesario. Por eso, actitudes de algunos personajes o diálogos que inmediatamente después de leerlos pueden parecer incoherentes, más adelante tienen sentido, aunque a lo mejor no te la narra, sino que hay que intuirlo.

La trama de la novela puede que no sorprenda a nadie que conozca el género, y algunas situaciones pueden parecer que se resuelven con un deux ex machina. Ello puede ser debido a la corta extensión del libro y a la velocidad con la que suceden los acontecimientos, pero para nada la hacen desmerecer.

Con ello, la novela tiene mucha acción y avanza muy rápido, las descripciones son sucintas y con apenas cuatro pinceladas logra hacer que entres en ambiente. Es un estilo claro y conciso, sin tapujos. Los diálogos son cortos, sin largos monólogos, pero buenos y muy bien escritos. Conseguirlo es una virtud que me gusta mucho y lo prefiero frente a otros autores que pueden estar veinte páginas describiendo sin que suceda nada relevante, no obstante, es cuestión de gustos.

Respecto a los personajes, la historia se centra en Waylander, el cruel asesino a sueldo, este personaje está bastante bien definida, así como en el sacerdote Dardalion, Ambos tienen una evolución muy elaborada y compleja, pese a lo corta que es la novela. Puede que este protagonista hoy en día resulte algo común, pero en su momento se separó de los cánones establecidos. Por otro lado, los secundarios, como Gellan, Karnak, Daynal, también están bastante desarrollados, resultando muy humanos, se nota mucho trabajo detrás. Además, el autor no duda en matarlos cuando la historia lo amerite.

Esta caracterización de los personajes, en parte, puede que fuera debido al rumor que dice que Gemmell fue despedido de su trabajo por utilizar nombres de compañeros y caricaturizarlos en este libro.


Reproducción de la ballesta doble de Waylander por Dorian Navarre

La edición que he leído se trata de la publicada en el año 2003 y sigue el estilo propio de Gigamesh que muchos ya conoceréis. Se trata de un libro con una portada de tapa blanda con solapas, sin excesivos alardes pero funcional y con un tamaño que resulta cómodo. De igual modo, su maquetación interior es correcta y sencilla. El gran inconveniente es que se encuentra descatalogado, por lo que puede resultar algo difícil de encontrar, ya que no se vende en librería ni está en versión Kindle, sin embargo, todavía se puede encontrar de segunda mano, así como en bibliotecas públicas.

Para concluir la reseña, Waylander se trata de una gran novela de aventuras sin las complejas tramas de mil páginas de la fantasía actual, pero con una narración y un ritmo vertiginoso que nada tiene que envidiarles. Esa es posible una de sus virtudes, David Gemmell te cuenta lo que te tiene que contar, sin rellenos ni artificios, pero de una forma que consigue que entres de lleno en la historia. Si lo que quieres es una frenética aventura épica, vas a disfrutar de este libro. La forja de un héroe legendario.

Puntuación: 5/5


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"Para dominar el miedo, debes darte cuenta de que no puedes escapar a lo que temes. Tienes que absorberlo. Vivir con ello. Saborearlo. Comprenderlo. Superarlo. "
Waylander





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